Por Armando León Lezama

Entrevistado para conocer su opinión respecto al conflicto que se vive en el Poder legislativo del Estado de Baja California Sur, dijo el abogado, «»estamos ante un problema innecesario».

Explicó que al interior del congreso local, «empezó el ambiente a estar enrarecido desde que cuatro representantes populares, se constituyeron en fracción cuando la ley reglamentaria no lo contempla, toda vez que eran miembros de una bancada integrada formalmente.

Agregó, «dicha fracción dividida se ladeó primero a la oposición y luego de meses se reintegró a su bancada».

Sin embargo, «ahora estamos en un momento, cuando se espera de los 21 integrantes del Congreso, sean ante el presente y la historia, auténticos legisladores».

Así lo precisó quien fuera diputado local y presidente de la junta de gobierno y coordinación política de la XIII Legislatura del Estado de Baja California Sur.

Añadió, «constitucionalmente, el gobernador de nuestra entidad, debe generar las condiciones suficientes en torno al congreso, para reestablecer el orden y mantener la seguridad de sus representados».

Asimismo, consideró que los integrantes de la XV legislatura Sudcaliforniana, «tienen el deber ser de actuar con sensatez, respeto mutuo y honorabilidad, para dejar de afectar a las ciudadanía y población en general, con sus diferencias».

Reiterando que el ejecutivo estatal debe asumir su obligación constitucional de abonar a qué se logre la estabilidad en el ejercicio democrático y legislativo».

Indicando, que por parte de las y los legisladores, «estos deben entender que la política es diálogo y se trata en éste caso de ceder sin sentir que hay ganadores o perdedores».

Finalizando, «el conflicto del congreso, debe terminar».