Por Carlos González M.
La fraccionadora Altamira, en un acto de abuso de poder y de ninguneo de las autoridades municipales de La Paz, cerraron el tránsito vehicular a través de sus calles desde el pasado mes de marzo, advirtiendo que lo hace para que no se desgaste el concreto de sus calles, obligando a decenas de personas a transitar por una calle cercana inservible, con baches, con un drenaje roto que continuamente despide olores y ¡material fecal!
Eso si, al reclamarle a empleados que colocaban el obstáculo, con vulgaridades se refirieron al alcalde como un sujeto que estaba enterado de esta acción y que la avalaba.
No se vale cerrar calles no más porque si, o qué ¿Rubén Muñoz está pintado? Creo si porque esta obstrucción al transito lleva desde marzo.
No cabe duda que quienes mandan son ellas y llevan haciéndolo mucho tiempo. Cuando habrá una autoridad que les pare el alto y las obligue a hacer casas decentes para personas, de buen tamaño.
¡Y que no cierren calles sólo por dañar a los vecinos!